Por qué la dieta mediterránea es tan recomendable

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Estudios realizados hace más de 30 años revelaron que los países de la cuenca mediterránea: España, Italia, Francia, Grecia y Portugal, tenían un menor porcentaje de infarto de miocardio y una menor tasa de mortalidad por cáncer. Los investigadores buscaron las posibles causas y descubrieron que la dieta jugaba un papel fundamental. A partir de entonces, se empezó a hablar de la dieta mediterránea como un factor a tener en cuenta en la prevención de estas enfermedades.


Los científicos fueron entonces perfilando los elementos que definen la dieta mediterránea: pasta y arroz, verduras, legumbres, abundante fruta, aceite de oliva, oleaginosas, poca carne y mucho pescado, pan integral, y todo sazonado con algunas especias como el ajo, el orégano, algo de pimienta y pequeñas cantidades de buen vino. En un principio no se sabía a ciencia cierta por qué funcionaba tan bien esta determinada combinación de alimentos. Pero, poco a poco, los nuevos descubrimientos en bioquímica y nutrición humana revelaron los secretos de una sabiduría milenaria.


Principales características de la dieta mediterránea


Llama la atención la abundancia de alimentos de origen vegetal: frutas, verduras, pan, pasta, arroz, cereales y legumbres, así como el consumo de alimentos de temporada y frescos. El aceite de oliva es la grasa principal, tanto para freír como para aderezar, y la preferencia por el pescado, sobre todo, azul y aves. Otras particularidades de la dieta mediterránea son:


• El consumo diario de una cantidad moderada de queso y/o yogurt; y de oleaginosas y aceitunas en baja cantidad
• La ingesta de carne roja dos veces al mes
• El beber vino tinto con moderación normalmente durante las comidas
• El uso de hierbas aromáticas como una alternativa saludable en lugar de la sal
• Realizar alguna actividad física regular para hacer trabajar al corazón y mantener en forma las articulaciones y músculos.


Los hidratos de carbono, pastas, arroz, pan y legumbres, deben proporcionar el 50% del aporte energético total diario. Las frutas y verduras son ricas en fibra, y aseguran las suficientes vitaminas y minerales. Las grasas o lípidos aportarán aproximadamente el 35% del aporte energético total. Se utilizan las grasas de origen vegetal, (oleaginosas, aceite de oliva) en lugar de las de origen animal.


Las proteínas aportarán el 15% de la energía total. Las proteínas ayudan a regenerar el tejido del organismo. La proteína de origen animal (huevos, leche, carne y pescados) es más completa que la de origen vegetal (legumbres y cereales). Sin embargo, los vegetales debidamente combinados (por ejemplo, lentejas con arroz) aportan una proteína de calidad similar a la animal, pero sin colesterol ni grasas saturadas.


Por una vida saludable, ¡prueba cambiar a la dieta mediterránea!

 

Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, mas no la ideología de actitudfem.com

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