Tips para amar tu cuerpo

Tal vez eres una chica que odia su cuerpo porque te han convencido, y te has dejado convencer, de que no tienes control sobre él. O quizá estás enojada porque tu cuerpo no se ve como el de las mujeres de las revistas, la televisión, el porno, o lo que sea.

Bueno, no estás sola. Todas tenemos inseguridades, en su mayoría relacionadas con nuestro físico. Lo importante es descubrirlas, aceptarlas y trabajar sobre ellas, para que al final del día tú tengas el control sobre esos miedos y que no permitas que ellos te controlen a ti.

Hoy te dejamos una lista corta, pero muy práctica, para amar tu cuerpo.

Mírate al espejo y di “te amo”

Párate frente al espejo, mírate a los ojos y di: “Te quiero”. Dilo. Piensa en la hermosa mujer que eres, digna de admiración, amor y devoción. Solo existe una como tú, en todo el universo y nunca jamás habrá alguien igual. Nunca lo olvides y comienza a sentirte cómoda en tu propia piel, tal como eres. Claro que puedes mejorar tu comportamiento, tus hábitos y pensamientos, porque puedes amarte y al mismo tiempo querer ser mejor.

Piensa en todo lo que puede hacer tu cuerpo

Tu cuerpo es una máquina maravillosa que guarda tu mente y tu alma. Si estás leyendo esto, entonces tu cuerpo está funcionando. Aunque tu mente hace el trabajo, el simple hecho de que hayas llegado hasta aquí es increíble y todo gracias a tu cuerpo. No le quites el valor que tiene y no lo desprecies porque no entra en los estándares superficiales de la sociedad.

Duerme desnuda

Cuando somos jóvenes, la mayoría de las mujeres no nos sentimos a gusto con nuestro cuerpo. Una forma de acostumbrarte a él y de apreciarlo es dormir desnuda, ¿por qué? Por el simple hecho de que comienzas a percibir a tu cuerpo en un estado natural y poco a poco dejas de sentirte avergonzada.

Mastúrbate

La masturbación es una gran forma de darle afecto físico a tu cuerpo, además te ayuda a familiarizarte contigo misma y a conocerte mejor. Antes de apreciar la belleza de alguien más, debes apreciar, de corazón, la tuya y eso incluye las partes más íntimas de tu cuerpo.

No hables mal de cuerpo

¿Hablarías mal del cuerpo de tu mejor amiga? ¿O del de tu mamá? Si no lo harías de otros, entonces tampoco lo hagas con el tuyo. Hablar mal de tu cuerpo no tiene sentido, es una pérdida de tiempo y cerebro. Si no vas a decir nada bueno de él, entonces no digas nada. Si sientes que vas a comenzar a criticarlo, mejor intenta decir “te quiero”. Odiar tu cuerpo no te lleva por un buen camino, mejor intenta ver a dónde te lleva quererlo.

Haz algo por él

Estira, sal a caminar, corre, baila, date un masaje en las piernas, come un rico helado, saca a pasear al perro, estírate en el trabajo, haz una serie de abdominales, prueba una nueva ensalada, exfóliate, ponte crema en los pies… algo bueno por tu cuerpo una vez a la semana, inténtalo y te darás cuenta de la gran diferencia.