Me lavé el cabello con jabón para trastes y esto fue lo que pasó

No todas las chicas tienen la mala fortuna de vivir con cabello graso, así que para algunas de ustedes este método no es recomendable, pero si llevas años luchando contra el cabello grasoso seguramente te ha pasado alguna vez que por más que lo lavas la grasa parece no irse de tu cabeza. Para esos momentos de emergencia extrema está el jabón para trastes.

Resulta que en el área del DF en la que vivimos de vez en cuando nos quedamos sin agua, y esto me obliga a lavar mi grasosa cabellera a cubetazos (porque no me puedo dar el lujo de pasar todo un día sin echarle jabón). Pero a pesar de mis esfuerzos, después de un fin de semana de medios baños, mi cabello necesita una buena lavada. Primero intenté usar sólo shampoo, pero la grasa se resistía a irse. Después recurrí a mi remedio favorito, una cucharadita de bicarbonato de sodio.

El problema fue que, cuando se secó mi cabello, me di cuenta de que había usado polvo para hornear en lugar de bicarbonato (en mi defensa los botes se parecen) y seguía teniendo un poco de grasa que se resistía a irse de mi. Así que gracias a una rápida búsqueda en Internet encontré varias personas que recomendaban usar unas gotitas de jabón para trastes.

Considerando que corta hasta la grasa de los sartenes decidí intentarlo. Primero apliqué acondicionador a las puntas para protegerlas y después sin enjuagar el acondicionador, usé un chorrito de jabón como del tamaño de una moneda de 2 pesos para tallar mi cuero cabelludo.

¡Sorpresa! Funcionó perfecto. Mi cabello dejó de sentirse pegajoso y por fin duró mi fleco todo un día sin engrasarse. ¿Usaría este método frecuentemente? La verdad no, creo que reseca más el cabello que el bicarbonato, así que lo dejaré como opción de emergencia, pero si alguna de ustedes ha pasado por un problema similar saben lo desesperante que es lavar y lavar y seguir sintiendo el pelo sucio.

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