Por culpa de tus compras compulsivas podrías terminar en el psiquiatra

Las compras compulsivas pueden llevarte directo al psiquiatra. Sí, a mí también me dolió el corazón cuando lo leí, porque básicamente pertenezco al grupo de las que salen a comprar cuando están aburridas, tristes, felices o enojadas  y terminan llevándose a casa miles de cosas que la mayoría del tiempo acaban guardadas, con etiquetas y sin usarse.

Este trastorno se llama oniomanía (del griego onios ‘lo que está en venta’ y manía ‘locura’) y fue acuñado en el siglo XIX por los psiquiatras Emil Kraepelin y Eugene Bleuler. Pero más allá de pensar que puede ser cool gastar mucho dinero en compras, hay un lado oscuro del que poco se habla.

Gabriela Orozco Calderón, profesora de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México, comentó para el sitio ADN40 que aunque este comportamiento no está inculido en los manuales psiquiátricos, sí es muy similar neurobiológicamente hablando a la ludopatía (incapacidad de abstenerse y detenerse ante el juego) que sí está incluida en conductas adictivas.

Entre los síntomas de este trastorno es común encontrar ansiedad, insatisfacción, falta de autocontrol y sentido de culpa tras realizar las compras. Seguro a ti también te pasó que después de comprar algo experimentaste un sentimiento de felicidad, pues eso es “la motivación” en este trastorno: la “felicidad momentánea”.

Como en casi todo, también hay niveles y claro que puedes darte cuenta cuando tus compras se están saliendo de control. En caso de ser así, puedes buscar ayuda profesional. Algunas recomendaciones que puede ayudarte son: no gastes más de lo que tienes o ganas, sobre todo en cosas que no necesitas. Si estás aburrida, sal a pasear y no lleves tarjetas ni dinero y siempre piensa dos veces antes de comprar cualquier cosa.