Un infarto, un corazón roto y todas las tragedias que marcaron la vida de Walter Mercado

A primera vista uno no cree ser fan de Walter Mercado, uno simplemente lo recuerda como ese astrólogo que vestía con capas brillantes y coloridas y te decía tu horóscopo por las mañanas.

Pero es precisamente por eso por lo que Walter Mercado marcó tan tajante papel en la televisión y en la dinámica de muchos hogares. 

Sin embargo, Walter Mercado era más que el tipo andrógino y místico de la tele y su vida fue mucho más dura de lo que jamás se atrevió a mostrar.

Walter de los Milagros

Desde que era pequeño, Walter Mercado Salinas mostró un gran don para la adivinación.

En Ponce, Puerto Rico, su pueblo natal, lo conocían como "Walter de los Milagros" y decenas de personas acudían a su casa para besarle la mano o al menos tocarlo.

Esa pasión por el misticismo la acompañó durante su licenciatura en Psicología, pero muy pronto su talento histriónico lo llevó a convertirse en actor de teatro y televisión. 

Fue precisamente gracias a su carrera en TV que el productor Elín Ortíz descubrió su talento para llamar la atención de la gente y lo convirtió en el astrólogo titular de su programa.

Walter Mercado: el astrólogo

Después de su primera aparición, el éxito de Walter Mercado se disparó. Aparecía en todas las más grandes cadenas de habla hispana e inglesa.

Clave de su éxito era que su mensaje tenía un alcance universal. Walter sabía lo mismo de catolicismo que de budismo, que de life coaching.

Su mensaje de despedida se convirtió en su marca personal. "Reciban paz mucha paz, pero sobre todo mucho mucho amor", y lanzaba un beso.

Todos sus mensajes eran positivos, todos estaban encaminados  dar a la gente esperanza aún si pasaban por un mal momento. Y quién no necesitaba un poco de inspiración de vez en cuando.

Y eso tal vez se debía a que a Walter no le gustaba pensar en los malos momentos, ni hablar de ellos. Solo sonreír y esperar a que pasaran.

La desaparición de Walter Mercado

Quien convirtió a Walter Mercado en una estrella fue el mismo hombre que destruiría su carrera años después: Bill Bakula.

De acuerdo con declaraciones de las sobrinas de Walter, Bakula siempre procuró halagar a Walter. En sus viajes siempre lo recibía con decenas de ramos de rosas blancas.

Tenía su propio jet, su propia limusina y capas tan opulentas como costosas para cada una de sus apariciones. A cambio, obtenía el consentimiento de Walter para prácticamente cualquier cosa.

Sin nadie que velara por sus intereses y con una confianza ciega en el hombre que consideraba "su ángel", Walter firmó un nuevo contrato con Bakula sin leer una sola palabra.

En él, el astrólogo cedía todos los derechos de su imagen, su marca y su material a perpetuidad. Bill Bakula lo había engañado y le había robado su vida. 

Seis largos años y una agotador juicio después, Walter se ganó el derecho de volver a utilizar su propio nombre en público. Pero jamás volvió a la televisión.

El pleito y la decepción se habían llevado toda su energía. En palabras de su sobrina Ivonne: "Bill Bakula le había roto el corazón".

Un infarto y un gran amor

Walter Mercado jamás habló de su vida privada, ni de su orientación sexual. De hecho no fue sino hasta 2012 cuando un infarto lo colocó al borde de la muerte que abrió su corazón.

En una entrevista con People, habló sobre una modelo boricua que había conocido años atrás y de la que se había enamorado perdidamente.

Sin embargo, falleció en un terrible accidente aéreo. "Para mí su muerte fue como un pedazo de mi cuerpo que se fue", reveló el astrólogo.

El dolor de la vejez

Si bien Walter Mercado no temía a la muerte, no se sentía cómodo con el tema de la vejez. 

Tomaba múltiples suplementos alimenticios, se había aplicado bótox "como el de Nicole Kidman" para rejuvencer su rostro. Incluso en su documental se negó a que tomaran su silla de ruedas o a que se mencionara su edad.

Para alguien que siempre había aparecido impecable y fabuloso ante su público era inaceptable mostrarse viejo, adolorido, decadente. 

Tal vez fue eso lo que lo llevó a recluirse en su casa de Puerto Rico, aun después de ganarle el pleito a Bakula. Ya no era el mismo Walter de antes y dar menos de sí mismo a la gente no era una opción.

FInalmente, el 2 de noviembre de 2019 Walter Mercado falleció a causa de una falla renal fulminante. 

Ahora su vida es recordada en el documental Mucho Mucho Amor: La Leyenda de Walter Mercado en Netflix.