Este experimento con niños evidencia el daño que ocasiona la desigualdad de género

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¿Te has preguntado dónde nacen todas esas ideas de que los hombres y las mujeres merecen tratos diferentes?

 

Cuando eras niña, seguramente puedes recordar, que la convivencia con los niños era bastante simple y nada difícil de sobrellevar. Es decir, para ti no había diferencias porque veías a todas las personas como tu igual.

 

Sin embargo, un día te diste cuenta que tus profesores y familiares le daban preferencia a los niños solo porque eran hombres: a ellos les daban la palabra, los premiaban o resaltaban cualidades más allá de su aspecto físico.

 

Hay muchos factores que influyen en la desigualdad de género, pero uno de ellos es la forma en que los adultos tratamos a los niños. Una muestra de esto la puede ver en el siguiente video.

 

Este sencillo experimento demuestra lo absurdo que resulta cuando un hombre y una mujer hacen lo mismo, pero el primero recibe una mayor recompensa. 

 

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Con esto, podemos ver claramente que lo importante es no perpetuar una educación en la que se privilegie a los hombres sólo por su género. El cambio debe y puede generarse desde pequeños.

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