10 bromas que todo godín que se respeta debe aplicar

Hace años, cuando en la oficina éramos 15 personas (y no 200 que convivimos ahora), tenías que tener mucho cuidado con no dejar tu computadora desbloqueada cuando te levantabas al baño, o al regresar te podías encontrar con mensajes curiosos publicados desde tu cuenta de Facebook o mails redactados desde tu cuenta invitando las pizzas.

Si se llevan bien en tu oficina y quieres empezar (o ganar) una guerra de bromas te dejamos algunas opciones divertidas, no muy manchadas y que no te meterán en problemas con RH.

1. Tapa el teclado con tape

Compra un lindo tape de colores y dale un nuevo decorado al teclado de tu compañero. La mayoría de nosotros podemos escribir sin ver las letras, pero debe ser molestísimo.

2. ¿Qué le pasa a mi compu?

Necesitas unos cuantos minutos (o mucha práctica) para hacer esto. Antes de empezar crea una carpeta nueva en el escritorio y llámala como quieras (algo no muy llamativo). Toma una captura de pantalla del escritorio de tu compañero. Abre Paint, pega la imagen y guárdala. Ahora mete todos los íconos de su escritorio en la carpeta que creaste (no te va a dejar mover la papelera de reciclaje).

Ahora abre la imagen que guardaste de su escritorio y ponla como fondo de pantalla. Asegúrate de que la carpeta con todos sus íconos y la papelera de reciclaje queden justo encima de los de la imagen.

Ahora da clic derecho en la barra de tareas (la que tiene el menú y los íconos de los programas abiertos) y despalomea la opción de “Bloquear barra de herramientas”. Ahora cuando pones tu mouse en la orillita de la barra te deja hacerla chiquita. Hasta tan chica como sea posible y listo. Te puedes ir a sentar y ver como tu compañero de trabajo sufre.

3. Clausura las tijeras

Fácil y molesto, sobre todo si las tijeras son lo que siempre se pierde y sólo hay unas en la oficina. ¿Cómo abres una cosa de estas sin tijeras?

4. El mouse poseído

Esto es tan fácil como divertido. Conecta un mouse inalámbrico a la computadora de tu compañera cuando no esté y muévele su pantalla como a la chica de este video.

5. Infarto al aracnofóbico

Si sabes que alguien en tu oficina le tiene miedo a las arañas toma un vaso de papel, corta un hoyo con las uñas y colócalo boca abajo junto al café con un post it que diga “Favor de no levantar, hay una araña gigante atrapada adentro”.

6. Infarto para todos

Esto. Esto es lo peor que le puedes hacer a alguien que trabaja el turno de la noche. Imprimes la mona, la pegas en cartulina, quitas un cuadro del techo, la acomodas y esperas que a nadie le de diabetes del susto.

7. Mi mouse no funciona

Esto es tan fácil y básico que seguramente ya lo has escuchado antes, pero es efectivo y usualmente la gente se da cuenta de qué está pasando antes de molestar a los de sistemas. Voltea el mouse de tu compañero y pega un pedacito de papel sobre el láser rojo (puedes escribirle un mensajito. También puedes sólo tapar el láser con tape pintado de negro con Sharpie.

8. Sopa de letras

La mayoría de los teclados de oficina tienen teclas que se levantan fácilmente. Necesitas un cuchillito o un desarmador plano para colocar la punta bajo la tecla, hacer palanca y zafarla. Antes de hacer cualquier cosa prueba con una tecla que casi no se use si es fácil quitarlas y volverlas a poner en el teclado de tu compañero.

Cambia una o dos teclas, te recomiendo que uses letras muy pegadas (como la S y la D o la O y la I) y no cambies muchas. Si tu compañero se sabe de memoria la posición de las letras se tardará un rato en darse cuenta, pero una vez que volteas a ver el teclado te puede sacar de quicio.

9. La posición de la silla

Si eres de las que llega temprano a la oficina escoge a un compañero para atormentar y todos los días, TODOS sin excepción, muévele el respaldo y la altura a su silla. Cuando pasas 8 horas en el mismo asiento esto puede volverte loco.

10. Encuentra al robaplumas

Lo que más se pierde en las oficinas son  las plumas así que compra una que no sea transparente (las amarillas funcionan), sácale la punta y la tinta, rellénala de diamantina y ponle la tapa. Cuando hagan el esfuerzo de destaparla volará la diamantina.

¿Tienes más? ¡Se aceptan sugerencias!