Viajar cueste lo que cueste

Cuando las personas recién descubren mi blog y se dan cuenta que llevo viajando por mucho tiempo el primer comentario que me hacen es: “Debes de tener mucho dinero para poder hacer eso” y la verdad es que no.

No tengo unos padres ricos que me depositan cada mes, tampoco me gané la lotería, mucho menos estoy bajo la nómina de algún sindicato de gobierno, lo único que tengo son prioridades. Lo he dicho una y otra vez y lo seguiré diciendo, para viajar o realizar cualquier proyecto que tengas en tu vida lo único que se requiere es darle la prioridad que se necesita y estar dispuesto a hacer sacrificios, los cuales en ocasiones se traducen en tu estilo de viajar.

Hay muchas formas de viajar, algunas personas prefieren hacerlo en paquetes todo incluido, otras un crucero por el caribe y otras simplemente no quiere “sufrir” y prefieren pagar más.

No estoy en contra de ninguna de ellas, pues todas son muy válidas pero si realmente quieres viajar lo tienes que hacer cueste lo que cueste. Si es necesario comer latas de atún en lugar de un restaurante con tal de poder subir a la Gran Muralla China, hazlo.

Si tienes que dormir en el suelo o cargar con una tienda de acampar a donde quiera que viajes con el propósito de poder ir a ver animales en África, hazlo. Si tienes que caminar 5 kilómetros con tu mochila en la espalda porque prefieres no gastar en el transporte de tu hotel a la estación de autobuses con el fin de guardar un poco de dinero y poder estar un día más en Francia, hazlo.

Si tienes que viajar de aventón por que el tren o avión es muy caro, hazlo.

La persona que se proponga como prioridad viajar, lo hará no importa la cantidad de dinero que tenga en su cuenta bancaria, habrá que hacer sacrificios, cambiar la forma en la que tengas que trasladarte u hospedarte, no tener siempre las comodidades que tienes en casa, pero todo eso tiene la mejor recompensas de todas: Ver el mundo y todo lo que éste tiene por ofrecer.

El ser humano siempre ha viajado, está en nuestra naturaleza, hoy en día tan sólo hemos caído en una zona de confort en la cual no nos gusta luchar por lo que deseamos, ¿para que batallar si puedo pagarlo?

Esta mentalidad de “poder  o tener que pagarlo con dinero” es lo que ha hecho que la idea de viajar se haya distorsionado y categorizado como algo de ricos, viajar no es cuestión de dinero, es cuestión de prioridad y querer hacerlo.

Muchos que leerán este artículo estarán de acuerdo, tomarán sus cosas y se irán de viaje, otros dirán que si pero que ellos no podrían hacerlo y unos últimos tan sólo creerán que estoy soñando y es imposible.

Acabo de regresar del Campamento Base del Everest, una experiencia que puede llegar a costarte más de 1,500 Dólares, sin embargo, he conocido en mi caminata hasta el Everest una serie de personas que con el simple hecho de poder vivir esa experiencia lo han hecho por su cuenta, gastando una décima parte de esa cantidad. 

Hablar con ellos, más mis experiencias de viaje me ha hecho reafirmar que realmente viajar es cuestión de prioridad y querer hacer tus sueños realidad.

Espero hagas los tuyos.

*Alejandro Núñez, escritor, viajero y emprendedor. Dejó todo para irse a viajar por el mundo, puedes seguirlo en su blog de Mi Viaje por el Mundo*