Crece con tus amigas, pero no se separen

Recibe lo mejor de nuestro contenido en tu correo SUSCRÍBETE

Al hacer click en Suscribirme quedarás registrad@ a nuestro boletín el cual podrás cancelar en cualquier momento.

Básicamente el concepto de tener un mejor amigo está arraigado en los humanos. El conceso general es que cuando ves hacia el abismo de todo lo que “podría ser” y con las posibilidades dando vueltas en tu cabeza, siempre es mejor tener a alguien a quien le puedas tomar la mano y decirle “Vamos a explorarlo juntos”.

 

Como en todas las buenas amistades, has tenido noches donde los sostienes mientras lloran en el carro de tu papá para tratar de sacar todo el dolor antes de que sea hora de regresar y seguro también hubo muchas noches donde a ti sostuvieron, pero esos no son los momentos que definen su amistad.

 

Los momentos más importantes son los que pasan en silencio que se mezclan hasta que los detalles se vuelven indefinibles. Las noches que se acostaron una junto a la otra en la oscuridad, planeando su futuro y la forma en que pueden ir en búsqueda de los sueños más locos, aquellos que no te atreviste a contarles a nadie más.

 


Las conversaciones sobre nada que te tuvieron doblada de risa en el suelo. Las miras a través de la habitación y las sonrisas con significado que te calmaron cuando tus pasos no eran seguros. Bueno, ya no están planeando. Sus futuros están sucediendo y están activamente en movimiento con destino a sus sueños, pero ahora se encuentran separadas.


Ya no están en el mismo lugar cuando se necesitan la una a la otra y ambas tienen conversaciones en la oscuridad con personas nuevas, pero no debes dejar que esto pase. No asumas que ellas saben lo mucho que te importan, diles aunque no sea el mejor lugar ni el mejor momento.

 


Diles durante los momentos en silencio, porque son esos lo que más importan. Diles en un estacionamiento vacío o justo antes de que comience la película, diles cuánto significan para ti hasta que sean tantas veces que los detalles no se puedan describir. Diles mientras puedes; diles mientras aún es verdad.

 

No sabía lo mucho que me hacías dormir hasta que llegaba a casa y me dolía la quijada. Debes saber que siempre tendrás una casa en mi corazón. Necesitas saber que, en cualquier momento, podría contar un millón de clichés sobre la amistad y todas serían verdad. No siempre podré estar ahí para ti pero nunca te decepcionaré.


No sé cómo mantener amistades en la edad adulta; apenas he entendido cómo prender una estufa. No he descubierto cómo mantenerte a ti, pero sé que no te estoy perdiendo. No estoy perdiendo a alguien como tú porque nada nuevo o brilloso podrá reemplazar las cosas que me has dado. Hiciste tu mejor trabajo al demostrarme que merecía ser amada, me ayudaste a verlo por mí misma.


Extraño muchas cosas, por las que no te agradecía, que no aprecié hasta que los kilómetros entre nosotras las iluminaron. Podrían existir espacios, grietas y pausas, pero nunca habrá un final para nosotras.


(via: Thought Catalog)

Compartir en Facebook compartir en twitter, se abrirá en otra ventana Compartir en Pinterest Agregar a favoritos Enviar por correo electrónico