Así vuelven a subestimar nuestra inteligencia los políticos...

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Una vez más los políticos de este país vuelven a subestimar a los ciudadanos al proponer una consulta popular para saber si los mexicanos estamos o no de acuerdo en que nos aumenten el salario mínimo. (Really?) ¿Quién en su sano juicio dirá “no, no estoy de acuerdo con el aumento”?


Esta es la propuesta que Acción Nacional propuso a la Cámara de Diputados para que se someta a revisión en una consulta popular durante las próximas elecciones de 2015. De acuerdo al presidente blanquiazul, Gustavo Madero, la promoción de la participación ciudadana obligará a que la Comisión Nacional de Salarios Mínimos aumente el salario mínimo.

 

 

¿Por qué debemos como ciudadanos demandar algo que por derecho nos corresponde? ¿Por qué debemos opinar si estamos o no a favor de un aumento al salario mínimo para que se analice la propuesta?, me pregunto entonces, ¿qué hacen nuestros legisladores en las cámaras?


Una consulta popular para “descubrir” la opinión de los mexicanos en este tema nos parece una absoluta pérdida de tiempo y recursos pues ya sabemos la opinión de los encuestados. ¿Por qué no hacer uso de este recurso para analizar temas más profundos y trascendentales como ya se planea hacer con la reforma energética?


Mientras nuestros políticos trabajan en este tipo de consultas, en Estados Unidos, el ex gobernador de Ohio, Ted Strickland realizó un curioso experimento: trató de vivir una semana con el salario mínimo que en aquella nación es de 290 dólares (3, 762 pesos mexicanos) semanales.

 

 

“No lo pude lograr”, señaló Strickland en Politico Magazine. El político relató que trató de vivir con 77 dólares (mil pesos) en comida, transporte y demás gastos básicos. El resto del dinero los dispuso para pagar impuestos y vivienda.


Sin embargo, para el martes el ex gobernador ¡ya no tenía dinero! El experimento de Strickland fue para llamar la atención mediática hacia la propuesta en la que los demócratas trabajan para incrementar el salario mínimo que no ha aumentado desde hace 5 años.


Es por eso que el gobernador de Illinois, Pat Quinn, firmó una iniciativa para que el tema se discuta en noviembre próximo.


Sin ánimo de ser pesimista, sí que vale la pena contrastar las iniciativas de la clase política en ambas naciones sobre un mismo tema: el aumento al salario mínimo.


¿Cuándo nos pondrán el ejemplo nuestros políticos de tratar de vivir con el salario mínimo en México, que por cierto es de $67.29 pesos diarios?


Aunque siendo honesta, qué podemos esperar de nuestra clase política cuando somos testigos de declaraciones tan absurdas como las que en su momento hiciera Ernesto Cordero, cuando fungía como secretario de Hacienda y Crédito Público.

 

En aquella ocasión, 2011, Cordero aseguró que “con 6 mil pesos al mes hay familias mexicanas que tienen el crédito para una vivienda, que tienen el crédito para un coche, que se dan tiempo de mandar a sus hijos a una escuela privada y están pagando las colegiaturas”.

 

 

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