Pollo a la miel con ajo

Una de las cosas más deliciosas de la comida es la infinidad de combinaciones que puedes lograr con ingredientes que parecieran no tener nada en común. En México somos especialistas en mezclar dulce con chile, y la cocina oriental también mezcla especias dulces con saladas en muchos de sus platillos.

Inspirándonos en todo y en nada creamos esta receta, tomando algunos ingredientes de recetas orientales y poniéndole nuestro toque… Aquí lo que nos salió:

Ingredientes

• 1 taza de aceite de oliva
• 1 taza de harina
• 1 cucharadita de tomillo
• 1 cucharadita de orégano seco
• ½ cucharadita de paprika
• ¼ de cucharadita de pimienta roja
• 500 gramos de pechuga de pollo sin hueso cortadas por la mitad
• 2 huevos revueltos
• Sal y pimienta al gusto

Para la salsa de miel con ajo:

• ½ taza de miel (o más, según vayan necesitando)
• 4 dientes de ajo picados
• 2 cucharadas de salsa de soya
• 1 cucharada de maicena

Preparación

En una cacerola mediana combina la miel, el ajo y la salsa de soya. Pon a fuego alto. En un tazón aparte mezcla la maicena con ¼ de agua. Mezcla bien y luego integra a la mezcla de miel hasta que quede una salsa espesa. Reserva.

En un sartén grande calienta el aceite de oliva a fuego medio.

En otro tazón combina la harina, el tomillo, el orégano, la paprika y la pimienta roja. Marina el pollo con esta mezcla agregando sal y pimienta al gusto a cada pechuga. El procedimiento es el siguiente: salpimenta la pechuga, pásala por la harina con especias, luego sumérgela en los huevos, luego pásala nuevamente por la harina para que la mezcla se pegue bien al pollo.

Coloca cada pechuga en el aceite para que se cocine hasta que se dore de cada lado. Luego pásalas a papeles de cocina para absorber el exceso de grasa.

Sumerge cada pechuga en la mezcla de miel y sirve inmediatamente. Chicas esto queda… para chuparse los dedos.

Pueden acompañar con arroz blanco o ensalada.