¿Te da miedo volar? Tips para superarlo

¿Tiene miedo a volar? He aquí algunas maneras alternativas para despedirse de la ansiedad durante el vuelo.

Entendemos las estadísticas. Volar es mucho más seguro que viajar en coche. Hemos escuchado todas las locas comparaciones: cómo es más probable ser alcanzados por un rayo, atacados por un tiburón o golpeados en la cabeza por un coco que cae, que perecer en un vuelo comercial.

Las probabilidades de morir en un simple vuelo con cualquiera de las 39 aerolíneas más seguras, son alrededor de 1 en 19.8 millones, de acuerdo con Planecrashinfo.com, una base de datos de accidentes de la industria de la aviación. Esas son muy buenas posibilidades. Y sin embargo, cuando abordamos un avión, o pensamos en dejar tierra firme, nuestra naturaleza racional no se encuentra en ninguna parte.

Nuestras palmas sudan, se nos acelera el corazón, tenemos problemas para respirar y las imágenes de una caída libre envuelta en llamas llenan nuestras mentes. En casos extremos, es posible que incluso nos neguemos a volar, prefiriendo pasar al menos la mitad de las vacaciones sentados en el coche.

Dice Juli Fraga, psicóloga en San Francisco:

El miedo a volar a menudo se debe a una inmensa ansiedad o preocupación que puede haber surgido de una serie de factores

El 11 de septiembre provocó un miedo desgastador en algunas personas, mientras que para otros, el miedo a volar puede ser parte de una tendencia mayor hacia la ansiedad. Agregue a eso cualquier experiencia negativa en avión (como un aterrizaje brusco), o falta de comprensión (o fe en) la física de la aviación, o una preocupación mayor como claustrofobia o miedo a sentirse fuera de control, y es un milagro que cualquiera de nosotros nos presentemos para abordar. Pero el mundo es demasiado grande como para limitarse a quedarse en casa, sobre todo cuando existen métodos confiables para superar estos temores.

LA MENTE POR ENCIMA DE LA MATERIA

“Dejar el suelo asusta a la gente”, dice Jeffrey Rose, hipnotista clínica en Nueva York. “Es más que nada porque volar es algo que no pueden controlar.” Lo que la gente puede controlar, sin embargo, es su forma de pensar, que es donde entra la hipnosis.

Durante una sesión, Rose guía a un paciente a un estado hipnótico, en el que introduce al paciente hacia sugerencias terapéuticas positivas específicas, como un sustituto de un temor o hábito en particular. En su forma más básica, Rose dice, “la hipnosis sustituye el negativo 'Mi avión se va a estrellar’ con 'Mi vuelo estará a salvo’.”

Más allá de controlar su pensamiento, también puede manejar su comportamiento. “Eso le da un sentido adicional de control sobre la experiencia de volar y le ayuda a ser un pasajero más confiado”, dice Rose. Unos cuantos cambios de estilo de vida “bajarán su nivel de estrés en general antes de volar”, explica, “lo que le pondrá en una mejor posición para afrontar con éxito su ansiedad relacionada con el vuelo”.

Como con cualquier cambio de estilo de vida, es mucho más fácil decirlo que hacerlo. Como, para empezar, dormir lo suficiente varias noches antes de un vuelo (incluso si esta directiva va en contra de todas las tareas de última hora y hacer las maletas necesarias antes de un viaje).

“Sin el sueño suficiente, el nivel de cortisol en su cuerpo, la principal hormona del estrés, se eleva, dejándolo menos capaz de aquietar sus pensamientos temerosos una vez que aborde el avión,” dice Michael Breus, especialista del sueño. En preparación para un vuelo, Rose, también nutricionista, sugiere evitar la cafeína (otro disparador del cortisol) y el alcohol (que deshidrata y eleva la frecuencia cardíaca), y beber mucha agua.

Así que si usted no puede esperar con calma el anuncio de embarque en un Starbucks o el bar del aeropuerto, ¿exactamente qué debe hacer? “Bueno, el ejercicio reduce las hormonas del estrés”, señala Rose. “Camine por la terminal”.