¿Te parece muy delgada?

La Universidad de Yale obligó a la estudiante France Chan a subir de peso pues de lo contrario, la darían de baja, ya que su vida corría peligro por su bajo peso, de acuerdo al especialista que la atendió.

Así, la estudiante, que mide 1.57 metros y pesa 42 kilogramos, explicó que hizo de todo para subir de peso, desde comer más helado hasta hacer más actividad física. Sin embargo, Chan apenas pudo ganar 900 gramos más y es que la joven intentó explicar a los médicos que su bajo peso es una herencia genética.

Todo inició en 2013 cuando la joven asistió al centro médico de la universidad por una protuberancia en el seno. Pese a que los estudios arrojaron que se trató de un tumor benigno, especialistas de Yale Health la llamaron nuevamente pos su bajo peso.

En el Huffington Post, Chan narró la terrible experiencia mediante una carta: “En las pasadas trese semanas, pasé 10 horas en el Yale Health, nuestro centro de salud para estudiantes. Desde diciembre, tuve pruebas semanales de orina, 3 exámenes de sangre y citas con un consejero mental y una nutrióloga. Mi corazón estaba bien; siempre ha estado bien, igual que el resto de mi cuerpo, entonces, ¿Cuál es el problema?

Tras la polémica suscitada, el nuevo médico del centro de salud reconoció el error de la institución luego de que los padres de Chan visitaran a las autoridades de la universidad de Yale y que ella escribiera una carta al presidente de la escuela y al Huffington Post. (Yale University Thinks I Have an Eating Disorder).

La Universidad de Yale se negó a hacer declaraciones públicas, argumentando que la salud de sus estudiantes es confidencial. Sin embargo, luego de reconocer el error cometido con Chan, la institución no condicionará más la estancia de la joven pero sí le pidió que suba, por lo menos, un kilogramo más.

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