Cómo hacer un frasco de la felicidad

happiness_jar_diy.jpg
happiness_jar_diy.jpg
Recibe lo mejor de nuestro contenido en tu correo SUSCRÍBETE

Al hacer click en Suscribirme quedarás registrad@ a nuestro boletín el cual podrás cancelar en cualquier momento.

Un frasco de la felicidad o Happiness Jar, es un proyecto inspirado por Elizabeth Gilbert autora de Comer, rezar, amar.


Es una manera sencilla de recordarte todos los días lo bueno que hubo en él, sin importar los retos y preocupaciones a los que te enfrentaste. Este proyecto es excelente para hacer con los peques de la casa, con tu chico o sola.


Instrucciones


1. Todos los días piensa en algo que te haga feliz. Puede ser algo que paso ese mismo día, pero en realidad no es forzoso. Se sincera contigo misma, muchas veces las cosas más simples son aquellas que importan más.

 

 

  • Deja de lado tus entendimientos culturales basados en la fe que tienen que ver con oraciones/suerte/deseos, que buscan la felicidad. También mantén fuera la crítica voz interna que no cree en la ella. Una de las cosas que impactará el uso del frasco es el acuerdo previo o los mensajes inculcados de las “reglas” que se deben seguir para que el mismo funcione. La cosa es, que no hay reglas. El frasco debe servirte y ayudarte a ti y no tú servir al frasco.
  • Si quieres poner otras cosas en el frasco, como un pequeño amuleto (objeto con significado) lo puedes hacer, es TU frasco y tú le das el significado especial.
  • Una variación de este proyecto es enfocarte en los momentos felices de cierta relación en tu vida (pareja, familia, hijos). Por ejemplo, una pareja puede comprometerse a escribir cosas que aman del otro todos los días, para después depositar las notas en el mismo frasco.

 

344ace2f9da748bf62984fd8d248d738.jpg

 

2. Escríbelo en un pedazo de papel. Encuentra pequeños pedazos de papel que sean aptos para escribir un pequeño mensaje.

 

  • Puedes ir un poco más allá y preparar los papales para escribir, pero en realidad puedes tomar un pedazo de servilleta, correo o revista, si así lo decides.

 

  • Si no puedes encontrar un pedazo de papel, escribe la nota en tu teléfono. Ponte un recordatorio y en cuanto puedas transcribe el mensaje para que puedas ponerle dentro del frasco.

 

3. Deposita diario en el frasco de la felicidad. La idea es que lo hagas todos los días, pero si las cosas en tu vida están muy agitadas y se te olvida, no te preocupes, no pasa nada, lo importante es que lo sigas haciendo en cuanto puedas.

 

 

  • Ponte recordatorios diarios en el celular.
  • Coloca el frasco en un lugar seguro, donde no se pueda caer y no lo puedan tirar, pero también que sea un lugar visible… no en el fondo de te tu clóset.
  • Te recomendamos buscar un frasco con tapa, para que evites que se salgan los papeles, además de que mantiene el polvo afuera.

57e3926b709c7c99236e380bd454a886.jpg

 

4. Lee los mensajes cuando las cosas se pongan difíciles. Esta es la parte especial de este proyecto. Cuando sientas que la vida se pone difícil y que no hay mucha felicidad en ella, saca y lee uno de los mensajes. Estos son recordatorios de la felicidad que ha existido otros días de tu vida y que seguirá presente en ella. El frasco de la felicidad es un boost a tu humor, a tu confianza y a tu moral.

 

 

  • Tu felicidad pasada te dará el confort necesario y te dará la esperanza de que haya más por venir. También te recordará que la felicidad va apareciendo a lo largo del camino y que no es un destino definido con paradas y acciones precisas.
  • Algunas personas comienzan su año leyendo sus pequeños recordatorios de felicidad del año pasado.
  • Considera hacer un collage o un scrapbook con todas las notas.


¿Qué les parece el proyecto? Cuéntenos en la parte de abajo.

Compartir en Facebook compartir en twitter, se abrirá en otra ventana Compartir en Pinterest Agregar a favoritos Enviar por correo electrónico