Sólo 5 días para ser papá

Lejos, muy lejos estamos de los permisos laborales por paternidad que existen en otros países del mundo. El 20 de marzo del año pasado, la Cámara de Diputados aprobó el dictamen que reforma la Ley Federal de los Trabajadores al Servicio del Estado, a partir del cual se otorgan sólo cinco días de permiso laboral con goce de sueldo a los funcionarios varones tras el nacimiento de un hijo o adopción.

¿Cinco días alcanzan para que un padre disfrute y se haga co-responsable del nacimiento de su bebé? ¿No estaremos reforzando los estereotipos machistas?

Una comparación

En una entrevista concedida a la publicación digital Animal Político, Alma Beltrán, coordinadora jurídica del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), señala que: 

México está muy por debajo de los estándares internacionales y de derecho comparado en cuanto al permiso de paternidad. Obviamente, cinco días no alcanzan para que un padre pueda disfrutar del nacimiento de su hijo, ni para que participe de las tareas y cuidados domésticos que esto implica 

Por su parte, Geraldina González de la Vega, abogada constitucionalista y consultora jurídica, hace una comparación con las licencias de paternidad de otros países, algunos de los cuales otorgan permisos de hasta tres años. “En Estados Unidos, se da a los padres 12 semanas de licencia sin goce de sueldo y con algunas especificaciones, algunos estados lo regulan a parte. En Europa la licencia por lo general es compartida con la madre y puede llegar hasta los 3 años. Claro, no todo el tiempo se goza del sueldo al 100%, y esta es una distinción relevante. En Alemania, por ejemplo, se reduce el salario dependiendo del tiempo que se pida, siendo lo máximo a percibir el 65% y estableciendo un pago máximo de mil 800 euros”, explica González de la Vega en su blog Treinta y siete grados.

Algo es algo

En el mismo reportaje, René López, de la organización civil Gendes (ONG mexicana que trabaja desde la perspectiva de género con énfasis en la masculinidad), considera que el permiso con goce de sueldo para los hombres trabajadores, a pesar de ser insuficiente, sí es un primer paso adelante. No obstante, señala, el camino a recorrer en materia de equidad entre hombres y mujeres aún es largo.

Lo que sí queda claro es que legislaciones tan tibias como ésta no ayudan a fomentar la corresponsabilidad de tareas entre hombres y mujeres, y siguen reforzando el estereotipo de que las mujeres son las encargadas del trabajo y cuidado del recién nacido, ¿no te parece?

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