8 datos científicos sobre las boobies

Estamos tan acostumbradas a verlos, esconderlos, mostrarlos cuando queremos, agrandarlos, tocarlos para descubrir bolitas, presumirlos, envidiarlos y amarlos que pocas veces nos preguntamos qué más hay detrás de nuestros senos.

Una parte del cuerpo prácticamente poética, erótica, sexual, maternal… órganos mágicos a los que no solemos ponerles más atención que a cualquier objeto decorativo. Por eso, cuando nos encontramos este artículo en el Huffington Post, ¡teníamos que compartirlo con ustedes!

Aquí les dejamos 8 datos verdaderamente sorprendentes de los senos:

1. Somos los únicos primates que los tienen de manera permanente

Según la experta Carole Jahme, somos la única especia de primates que tienen las boobies de manera permanente. Los demás mamíferos las desarrollan cuando las necesitan para amamantar y regresan a un tamaño casi imperceptible cuando terminan esta etapa.

2. Las boobies más grandes

El récord Guiness a las boobies naturales más grandes lo tiene Annie Hawkins-Turner. Su busto mide 177.8 centímetros (alrededor de la espalda). Cada pecho pesa 25 kilos y si existiera su talla de bra sería 102 ZZZ. ¡Imagínense el dolor de espalda!

3. Orgasmos en los senos

¿Habían escuchado de mujeres que tienen un orgasmo cuando les estimulan los pezones? Pues esto es 100% factible. Un estudio realizado este año por la revista Men’s Health demostró que 29% de las mujeres lo han experimentado. El Journal of Sexual Medicine demostró que la estimulación de los pezones activa una respuesta cerebral en la corteza genital, lo que deriva en suficiente placer para sentir un orgasmo. ¡A intentarlo chicas!

4. Producen el alimento perfecto

La Organización Mundial de la Salud describe la leche materna y el calostro como el alimento perfecto. Contiene la cantidad suficiente de anticuerpos para fortalecer el sistema inmunológico de los bebés recién nacidos.

5. El tamaño no importa

Si de amamantar se trata, el tamaño de las boobies no influye para nada. Muchas mujeres de senos pequeños piensan que tendrán dificultades para hacerlo, pero la naturaleza es tan sabia que nos dio las mismas posibilidades a todas.

6. Crecen antes de tu periodo

Si creían que era una ilusión, pues la ciencia lo confirma chicas, nuestras boobies pueden crecer hasta una copa completa antes de la menstruación. Además, un estudio acaba de comprobar que pueden llegar a aumentar hasta 25% de su tamaño cuando estamos excitadas… ¿y creíamos que no se nos notaba? Sólo hay que ser más observadoras…

7. Tenemos uno más grande

Y por lo general es el izquierdo. 65% de las mujeres tenemos la boobie izquierda más grande que la derecha, sin explicación aparente, aunque existen varias teorías: una sugiere que se debe a la hipersensibilidad inmunológica que es más alta en el lado izquierdo del cuerpo, lo que impacta en las hormonas haciendo que unas sean más grandes; otra sugiere que es un resultado evolutivo porque es más fácil amamantar del lado izquierdo.

8. Tipos de pezones

Existen los pezones “normales”, que se elevan unos cuantos milímetros sobre la aureola (los más comunes, que crecen un poco cuando hace frío o cuando estamos excitadas). Están los pezones “planos” que están al mismo nivel de la aureola y sólo se elevan un poco bajo las mismas condiciones; los “invertidos” que, literal, están al revés (sin que esto sea un problema para la mujer si nació así…) y los “esponjosos”, que tienen la aureola un poco levantada junto al pezón.