El síndrome del peor es nada

Síndrome del peor es nada
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Veo a mi alrededor, todos mis conocidos se están casando. Llega el fin de semana y los planes se reducen a bodas, cenas de pareja o bautizos. Llevo con mi pareja un par de años pero aún no damos el siguiente paso. Hay algo dentro de mí que no se siente totalmente plena y feliz, sin embargo sigo con él. A pesar de las peleas o roces no encuentro de dónde agarrarme para cortarlo. No sé cómo estar sola a mis 30 y enfrentar el reto de lo que conlleva la soledad.


La estabilidad en la pareja crea seguridad y da estructura en la relación. Sin embargo es muy diferente seguir con la pareja “por miedo a estar solo”. Se continua juntos sólo por costumbre. Ambos se sienten atados, pero no se atreven a terminar porque temen el volver a comenzar y enfrentarse a ellos mismos.


Este tipo de relaciones llegan a convertirse en dañinas o tóxicas ya que existe el sentimiento de Dependencia o Necesidad. La lucha interminable ante la sensación de pérdida o de abandono. No se resignan a la ruptura, permanecen y se aferran inexplicablemente a una relación absurda.


Para todas las fieles seguidoras de ActitudFEM se les comparte algunos tips para darse cuenta cuando han caído en el Síndrome del Peor es Nada.


Presión Social

 

En muchas ocasiones a determinada edad pertenecer a una sociedad es estar en pareja. Llega el momento en que la mayoría de tus amigas se casan y tienen hijos. Esto puede hacerte creer y sentir  que el estar sola es incómodo y raro.


Constantemente los familiares y amigos te cuestionan ¿porque no tienes novios? Hacen todo lo posible para verte en pareja llegando a planear citas a ciegas. Esto lleva en muchas ocasiones a tener una pareja para seguir un “protocolo” y no sentirse sola.


Miedos

 

¿Constantemente evades tus emociones? ¿Sabes identificar tus miedos? Saber a qué le temes es una herramienta poderosa que nos ayuda a vivir con mayor claridad: “a estar sola, a volver a empezar una relación, a no encontrar alguien que te guste tanto, a verlo con otra, a perder contacto con el…” ¡Que tus miedos no te paralicen! ¡Enfréntalos!

 

Dependencia

 

Arthur Aron, profesor de la Universidad de NY señala que las áreas que se activan en el cerebro cuando estamos enamorados son las mismas que se activan cuando se consume cocaína, generando así dependencia hacia la persona.


El enamoramiento, la necesidad de estar con tu pareja hace que pierdas objetividad y claridad al idealizarlo. Si estás en una relación que te hace sufrir constantemente, dependes de él, te quita libertad es posible que te encuentres en una relación codependiente. Tu relación se convierte en una adicción por lo cual explica porque es tan difícil terminar.


Edad

 

Resulta un tanto absurdo pero en ocasiones la edad pesa. Entre las mujeres es común escuchar: ¿Quién se va a fijar después de mí a los 35? ¡Divorciados o con hijos!  El típico refrán hace alusión a “Más vale malo por conocido que bueno por conocer”.


Esto explica como muchas mujeres se conforman con lo que conocen a pesar de no estar contentas y satisfechas. Tienen miedo a arriesgarse a conocer algo diferente. Es así como uno permanece por años en su zona de confort.

 

Cambiar al otro

 

Hoy eres consciente que por lo general tus quejas son hacia tu  pareja. “Que si no te trata bien, no es detallista, controla tu forma de vestir, no hay apoyo profesional y es mujeriego”. Esto es síntoma de que el verdadero vació se encuentra en ti y se esconde en puros reproches y señalamientos hacia él.


Es importante que te cuestiones: Si realmente no estoy feliz, ¿cuál es mi necesidad de estar ahí? Si estás en una relación o no te dan el amor que quieres, debes comenzar a buscar una solución, pero no en el otro, sino dentro de ti.


Soledad

 

En nuestra época resulta como si la soledad fuera sinónimo de tristeza y vacío emocional. Es importante recordar que para amar y entregarse a alguien primero es a sí mismo.


Conocer lo que quieres y lo que anhelas en tu vida. Reconocer lo que te hace feliz y plena. Disfrutar de esas pequeñas alegrías como tus hobbies: ir al cine, caminar en el bosque, clases de pintura, baile, terapia... que llegan a hacer la diferencia


Costumbre

 

Ya son muchos años de conocerse. Dominan sus mañas, cambios de humor y  gustos. Ya perteneces y te sientes parte de su familia y de sus cuates. En momentos disfrutas y te sientes más enamorada de todo lo que lo rodea más que de él.


Sientes que has encontrado una identidad con tu pareja. Ya tienes los fines de semana resueltos y sabes con quien ir acompañado a tus eventos sociales. Más que perderlo a él tienes mucho miedo de enfrentarte a ti misma y perder lo construido en este tiempo juntos.


No te engañes

 

El autoengaño se presenta como una forma de autodefensa, es una manera de querer creer que esta realidad es la que conviene. De esa forma, las inseguridades y los sentimientos de inferioridad y baja autoestima se evaden.


Es importante darte cuenta de aquello que te lastima, de lo que no te conviene y no continúes en un patrón de justificaciones.

 

Si quieres ahondar más en este tema, la Psicóloga Helena Lebrija, especialista en terapia emocional y orientación psicológica, da consultas en:

 


Londres 75- 401 d
Col. Juárez c.p. 06600, Méx. DF
Tel. 55142689
Mail: helenlebrija@hotmail.com
Twitter:   @helenlebrija

 

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Aclaración:
El contenido mostrado es responsabilidad del autor y refleja su punto de vista, mas no la ideología de actitudfem.com

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