Guía para sobrevivir a la convivencia diaria con tu ex

Tener que convivir todos los días con tu ex puede ser una pesadilla, sobre todo si quedan sentimientos de por medio o si alguien salió con el ego lastimado.

Ayer hablábamos de esas relaciones que deberíamos evitar por salud mental y por no hacernos pasar por momentos incómodos, pero si ya estás en la situación de trabajar, convivir o tener que estar codo con codo con tu ex por la vida, seguro necesitas esta guía de supervivencia.

1. Arréglate

No hay mejor levantón de ego que el que nos da el espejo cuando nos regala una imagen increíble de nosotras. No se trata de arreglarte para él, se trata de verte más guapa tú misma, de sentirte bonita, sexy, coqueta… Si de paso él se da cuenta es un extra.

No salgas de tu casa sin sentirte 100% a gusto con tu imagen personal, desde el cabello hasta los tacones, ponte lo que necesites para ayudar a tu autoestima y estimular positivamente tu ego.

2. Evita rumores

Si tienen que convivir con las mismas personas, evita hacer comentarios negativos sobre la relación o sobre su persona. Hablar mal de él pondrá incómodos a todos los que los rodean y eventualmente se volverá en tu contra.

Si necesitas hablar hazlo con amigas tuyas que no tengan nada que ver con él ni con su ambiente, así podrás desahogarte sin que te resulte contraproducente.

3. No seas condescendiente

Las mujeres tendemos a “compensar” nuestras decisiones con acciones condescendientes. Si terminaste con él o él terminó contigo nadie debe hacerle “favores” a nadie para que se sienta bien. Sobre todo si trabajan juntos, no hagas cosas que no te corresponden sólo porque te sientes culpable de algo.

4. No llames su atención desesperadamente

Otra cosa que solemos hacer constantemente es tratar de llamar su atención riéndonos exageradamente fuerte o coqueteando con cualquier hombre que se cruza en nuestro camino. Olvídate de estas actitudes, lo único que le hacen pensar es que te sigue importando, y aunque así sea no necesitamos recordárselo constantemente.

Recuerda que las acciones más sutiles son las que muestran más actitud frente a los problemas de pareja. Si te ves guapísima y tienes una sonrisa de lo más natural llamarás su atención de manera positiva.

Básicamente sé tú misma, siempre y en todo momento. Guapa, segura, simpática, alegre. Si esto le recuerda a la gran mujer que dejó ir, bien por ti. Si no, te lo recuerda a ti misma.
¡Y ojo con el alcohol! Si van a fiestas juntos aléjate del tequila, nunca termina en nada bueno.

5. Sé honesta contigo misma

Este es el paso más importante. Antes de enfrentarte a la situación de convivir diariamente analiza cómo te sientes, qué sientes, qué esperas, qué te duele, y conforme pasen los días reflexiona qué momentos duelen más o que situaciones te lastiman o te hacen sentir incómoda.

Lo más importante para estar bien después de una separación es ser honestas con nosotras mismas y no exponernos a situaciones dramáticas innecesarias.

Si trabajas con él y no te sientes lista para enfrentarlo tal vez sea buen momento para pedir unas vacaciones. No te sientas mal o culpable de ser ESA mujer que cambia su vida por un hombre, recuerda que para poder ser la LA mujer que siempre has sido necesitas estar bien y esto implica tomar algunas medidas de emergencia.

No se trata de cambios radicales, sólo de tomar las decisiones que más te convengan según lo que sientes en el momento en que lo sientes. La convivencia diaria puede ser una pesadilla, así que sé sincera sobre lo que necesitas y búscalo. Si necesitas hablar con él, hazlo y pónganse de acuerdo en una rutina que los afecte lo menos posible.

Poco a poco volverás a estar bien, él volverá a estar bien y la convivencia será mucho más sencilla, casi como era antes de la relación.