Los lunes son horribles y la ciencia lo sabe

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Cada vez que se termina el fin de semana nos da la “depre de domingo por la noche”. El tiempo de descanso se acaba y dentro de pocas horas sabes que llegará el odiado y castigado lunes. Los lunes son horribles y no eres la única que lo piensa, la ciencia lo sabe y tiene una explicación de por qué los odiamos tanto.

 

1. No duermes bien


Tus patrones de sueño cambian los fines de semana. Tratas de dormir más pero terminas sintiéndote más cansada. De pronto es la madrugada del lunes, te dan las tres de la mañana, sigues con el ojo pelón y no sabes por qué. Esto provoca que el lunes te sientas como si te hubiera atropellado el metrobus.

 


2. Eres improductiva


No sólo sientes que no quieres hacer nada, un estudio demostró que el comportamiento de tribu que tenemos los humanos nos provoca la necesidad de socializar con otros para asegurar nuestro lugar dentro del grupo. Por eso pasas más tiempo platicando con tus compañeros los lunes, y menos sacando pendientes.

 

 

3. Te sientes mal contigo misma


Encima de que no terminas tu trabajo (y esto te hace sentir mal) los fines de semana generalmente involucran comer (o beber) de más. Otro estudio demostró que las mujeres en Estados Unidos se sienten menos atractivas los lunes. Encima de todo este sentimiento provoca que hagas cambios que, aunque son positivos, tienen efectos negativos en tu humor (como empezar una dieta o dejar de fumar). 

 


4. Los cambios de humor


Para este momento del lunes estás desvelada, te sientes fea, con hambre y privada de nicotina además de que como no eres productiva el lunes se siente como que nunca va a terminar.

 

Curiosamente, los martes, miércoles y jueves no son mejores, pero el lunes se siente como el peor día de todos porque hay un cambio muy drástico entre la felicidad dominguera y la depresión de inicio de semana. Un estudio demostró que estos cambios bruscos provocan que pensemos que el lunes es lo peor que nos puede pasar, y así perpetuamos la idea de que ese es el peor día de la semana. Pero al final todo se resume en el último punto.

 

 

5. Odias tu trabajo


Una encuesta realizada en Estados Unidos concluyó que el 70% de las personas odian su trabajo. La ansiedad por tener que regresar a trabajar puede empezar desde el domingo por la noche, y provocar que el lunes se sienta como algo realmente infernal. Por eso los martes es el día en el que se mandan más aplicaciones de trabajo. Si encima de estar desvelada, sentirte fea, tener hambre, estar privada de nicotina, no ser productiva y tener fresco el recuerdo del amado domingo además odias tu trabajo entendemos perfectamente por qué tú, como Garfield, desprecias los lunes.

 

 

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