Sé que te duele, pero con él encontré la felicidad que contigo nunca tuve

Recibe lo mejor de nuestro contenido en tu correo SUSCRÍBETE

Al hacer click en Suscribirme quedarás registrad@ a nuestro boletín el cual podrás cancelar en cualquier momento.

Vi tan lejano este momento, de hecho lo vi imposible. Tenía el corazón tan roto que pensaba que ya no habría manera de curarlo, pensaba que me quedaría esperando tu regreso toda la vida, pensaba que jamás volvería a amar.

Pero lo hice. Hoy amo de nuevo, pero, lo más importante y hermoso, me aman a mí.

Te puede interesar: No hay manual para esto: me enamoré en la pandemia y puede ser lo mejor que me ha pasado.

Me aman como tú jamás supiste hacerlo; me aman con fuerza, con sinceridad, con calidez y me aman tal y como soy. Me aman más de lo que pude imaginar, más de lo que yo quería que me amaras tú. Hoy me aman y me di cuenta de que, entonces, lo que tú sentías por mí eran boronas, era nada. Era, quizá, todo menos amor.

Ahora no lo soportas y, duramente, lo entiendo. Sin embargo, hoy soy feliz, más feliz de lo que fui contigo, y no te reclamo, al contrario, agradezco que tú hayas sido el camino y él el destino. Porque sí, encontré el amor verdadero. Ése que jamás tuve contigo.

Hoy ya no te guardo rencor, dejé de estar molesta contigo porque he sanado las heridas que jamás te preocupaste en hacer, por ello, no hay nada que pueda desearte más que felicidad; espero que tú también sanes, te cures y, sobre todo, que te amen tanto como me aman a mí, pero, también, que aprendas lo que es amar de verdad.

Te puede interesar: 10 consejos para recién casados que les ayudarán a tener un matrimonio exitoso.

Sé que te duele, pero a mí también me dolió antes. Te duele y aunque me gustaría que no fuera así, no puedo negarte que soy más feliz de lo que nunca pensé y espero algún día te sientas igual.

Antes habría sido imposible despedirme de ti, soltarte, dejarte atrás; antes habría sido imposible dejar de pensar en ti, dejar de amarte. Pero ya no lo es. Ahora eres parte de mi pasado y te suelto totalmente. Y espero tú puedas hacer lo mismo conmigo, espero que me dejes ir, que me des tranquilidad, al fin, y me dejes ser feliz. Por ti y por mí, es lo mejor.

Porque, aunque te duela, mereces saber que con él encontré la felicidad que contigo nunca tuve.

Compartir en Facebook compartir en twitter, se abrirá en otra ventana Compartir en Pinterest Agregar a favoritos Enviar por correo electrónico