La verdadera amistad no se trata de ser inseparables, sino de estar separadas y que nada cambie

Queridas mejores amigas:

¿Qué no hemos pasado juntas? Nos conocemos desde hace tantos años que es difícil dimensionar lo que hemos vivido.

Cuando hablo de ustedes, le digo a la gente que sí son mis mejores amigas, pero qué más bien son mis hermanas.

Como en la familia, pasamos de vernos a diario en la escuela, a vernos menos en la universidad y finalmente a mudarnos a diferentes ciudades y hasta países.

Pero nada de eso ha cambiado nuestra amistad, si acaso la ha hecho más fuerte. Y tampoco es que hablemos a diario, hemos pasado periodos de 3 o 4 meses sin hablar.

Y cuando nos volvemos a hablar o ver, hay el mismo cariño, la misma confianza, el mismo respeto, y las mismas ganas de chismear.

Cuando teníamos 15 me gustaba pensar que íbamos a ser amigas hasta los 80 años. Ahora estoy segura de que va a ser así.

Las quiero hasta el infinito, y espero verlas pronto y volvernos a abrazar como si nos hubiéramos visto ayer.