Cosas que no sabías que hacías mal y te están haciendo envejecer
Evitar el envejecimiento prematuro se ha convertido en todo un reto tanto para mujeres como para los hombres. Más que por vanidad, otras de las razones han sido salud, estética y autoestima.
La ciencia ha sacado al mercado una cantidad considerable de productos, utilizados por las personas para evitar el envejecimiento prematuro de la piel, y aunque varios de ellos son bastante costosos de adquirir, las personas, especialmente mujeres; gastan mucho dinero para obtenerlas.
Utilizar toda esta cantidad de productos, no son suficiente para evitar el envejecimiento prematuro, dado que muchos de nuestros malos hábitos, son la causa principal de que nuestra piel envejezca más rápido de lo normal.
Sin darnos cuenta, a diario tenemos una serie de rutinas e inconscientemente costumbres, que están generando que la piel se arrugue antes de tiempo, aparezcan manchas, se genere flacidez, pierda brillo y luminosidad.
A continuación, te contamos cuales son algunos de esos malos hábitos.
Dormir del mismo lado siempre
Este factor aplica especialmente en el envejecimiento acelerado en la zona de la cara, ya que todo el peso lo depositamos sobre un solo lado del rostro que generan pequeñas líneas de expresión. Lo más recomendado es dormir siempre boca arriba.
Respirar con la boca abierta
Aunque suene extraño, este hábito por lo general es algo que ocurre con frecuencia durante la noche, cuando nuestro rostro, especialmente el área de la mandíbula se relaja; esta práctica afecta la piel inferior del rostro generando flacidez y a su vez arrugas. Puedes realizar ejercicios que te ayuden a entrenar tu mente y cambiar el hábito.
Masticar siempre de un lado
Realizar constantemente este mal hábito, contribuye a un proceso llamado asimetría facial; se puede evitar al masticar alternando los alimentos en ambos lados de la boca.
Utilizar el celular con la cabeza hacia abajo
Este hábito genera un colapso en los músculos del cuello, ocasionando flacidez en esta zona y a su vez líneas de expresión. Trata por mantener una adecuada postura, con mirada al frente al momento de usar estos aparatos.
Exagerados gestos expresivos
De los más comunes, y menos detectados; pues en nuestro diario vivir siempre estamos haciendo gestos con zonas de nuestro rostro. El problema esta cuando se realizan de una forma exagerada; cuando reímos, lloramos, fruncimos el ceño o hacemos caras graciosas. Todo esto crea líneas de expresión en varios puntos específicos de nuestra cara. Puede evitarse al limitar estos gestos exagerados.