Por qué necesitas un bloqueador solar especial para tu carita

Por qué es necesario utilizar un protector solar para el rostro y otro para el cuerpo. 

De un tiempo para acá, todo mundo recomienda utilizar protector solar, pero muchas veces las personas dejamos de utilizarlo porque ninguno nos acomoda: nos deja el rostro grasoso, blancuzco, nos irrita los ojos...Y es ahí donde entra el protector solar facial. Porque sí, a veces es mejor tener dos protectores solares separados.

¿Cuál es la diferencia entre un protector solar facial y otro corporal?

A partir de la última década, la protección solar se volvió un tema fundamental de cualquier discusión sobre skincare y qué bueno. La protección solar es una costumbre que todas las personas deberíamos de tener, pero que, debido al gasto que implica realizarla, así como que es difícil encontrar una fórmula que nos acomode.

Porque ésa es una realidad que debemos de aceptar: hallar un bloqueador solar de nuestra entera satisfacción no es sencillo. Requiere ensayo y error o en otras palabras: comprar varios hasta que encontremos el ideal.

De acuerdo a la Revista del Consumidor, sólo uno de cada 10 mexicanos utiliza protector solar. La Ciudad de México, por ejemplo, suele tener altos índices de radiación solar, por lo que utilizar protector solar debería de ser algo cotidiano y no un lujo que unos pocos se puedan costear (afortunadamente tenemos recomendaciones económicas. Más adelante te las compartiremos).

Los bloqueadores solares para el cuerpo no suelen ser muy costosos: normalmente rondan de los 180 a los 250 pesos mexicanos en súper mercados o en 400 a los 700 pesos mexicanos en farmacias dermatológicas. 

Para alguien que a penas se está adentrando al mundo de la protección solar, utilizar un sólo producto para rostro y cuerpo podría parecer suficiente; no obstante, existen varias razones de peso por las cuales es ideal utilizar dos productos por separado.

Firmas como Nivea, La Roche Posay, Avéne, Vichy, entre otras ofrecen tanto protectores solares corporales como para el cuerpo. Los primeros vienen en amplias gamas con características para todas las necesidades: desde las personas cuya piel es sensible hasta para quienes tienen acné y se preocupan porque el protector solar provoque mayor producción de sebo. 

Y aunque los segundos no atienden condiciones de la piel tan diversas, también existe una variedad amplia de protectores solares corporales. Desde aquellos diseñados para los que hacen ejercicio a la intemperie hasta presentaciones en aerosol para una aplicación más cómoda. También existen versiones para la piel de los más pequeños. 

A pesar de toda esa variedad, los protectores solares corporales no suelen ser aptos para aplicar en el contorno de ojos. No porque tengan algún ingrediente perjudicial, sino porque pueden generar una sensación de comenzón en los ojos o incluso provocar ojos llorosos. 

Por eso mismo, utilizar un protector solar facial, que generalmente suele estar probado oftalmológicamente, es mejor. 

Los mejores protectores solares faciales y corporales

Determinar cuál es el mejor protector solar facial y corporal no es sencillo. Definitivamente dependerá de las preferencias y necesidades de cada persona; no obstante, existen algunas firmas cuya innovación las hace destacar.

La Roche Posay es una de ellas. Como te hemos compartido en nuestras guías anteriores sobre el tema, La Roche Posay ofrece una gama sumamente amplia de protectores solares faciales para piel madura o para piel sensible al Sol. 

Mi favorito es el Anthelios Fluido Invisible porque es el único protector solar que no irrita mis ojos y cuya textura es ultra ligera. Mi piel grasa lo ama porque no me genera mayor sebo en el cutis, ni obstruye mis poros.

Imagen: Instagram @larocheposay

Sin embargo, Nivea tiene una opción para piel grasa mucho más económica y de gran calidad. El protector solar facial Control brillo tiene un costo de alrededor de $170 pesos frente a los $550 del Anthelios Fluido. 

Imagen: cortesía de la marca

Es importante señalar que las texturas entre ambos productos son muy diferentes: mientras que el Anthelios Fluido es, como su nombre lo indica, súper ligero, líquido y fácil de reaplicar; el Control Brillo tiene una textura más pesada, necesita mayor tiempo para absorberse, porque de lo contrario sí deja marcas blancas en el rostro.

Además, Anthelios Fluido no irrita para nada a mis ojos, mientras que el Nivea no se siente tan cómodo como el Anthelios, aunque tampoco los irrita mucho. 

Los precios en los cosméticos no son arbitrarios; un protector solar cuesta más que otro no sólo por la marca o el punto de venta, sino por la innovación en sus texturas e ingredientes. 

No obstante, si no cuentas con el dinero suficiente para comprar el Anthelios, el Control brillo es una excelente opción.

Por su parte, Nivea cuenta con protectores solares maravillosos que no le piden nada a otros como Avéne. El protector solar Nivea Sun Protección e hidratación es hidratante, sin ser grasoso o dejar marcas en la ropa. 

Tiene un costo apróximado de $175 pesos mexicanos y no ha causado ninguna irritación en mi piel sensible.

Avéne vende, por su parte, un protector solar corporal para piel sensible pensado en los más pequeños, pero funcional también para los adultos. Tiene un costo apróximado de $430 pesos mexicanos. Su textura es un poco más pesada que la del Nivea Sun, pero igual de efectivo. No noté diferencias.

Fotografía: Instagram @avenemexico

El protector solar corporal lo aplico diariamente en mis brazos y piernas si utilizo vestido o shorts. En los brazos lo aplico diariamente porque quedan expuestos al Sol, pero si consideras que tu exposición solar corporal es mínima, Nivea también cuenta con otra opción. 

Fotografía: iStock

La crema corporal Protección solar FPS 15 promete proteger tu piel de los rayos ultravioleta (aunque, es recomendable utilizar un factor de protección más alto) así como de la contaminación de las ciudades.

Su textura es muy ligera, ideal para quienes desean una crema que hidrate, sin sentir su piel grasosa. En lo personal, prefiero texturas más untuosas. 

De tal modo que ya sabes: no hay excusa para no cuidar nuestra piel y carita de los rayos UV. 

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