3 errores comunes al usar protector solar

Por si no lo sabías, se estima que 7 de cada 10 mujeres no se protegen correctamente del sol. Resguardarse de las radiaciones solares no es suficiente si se hace de forma incorrecta.

¿Sabes cuáles son los tres errores más frecuentes al aplicar el protector y cómo solucionarlos? Varios expertos nos lo explican.

1. El factor de protección solar, FPS 

Tres letras –y un número– que indican el tiempo que el cosmético protege la piel contra los rayos ultravioletas, y cuyo “poder” se puede medir, según indican los expertos de la Escuela de Medicina y Salud Pública de la Universidad de Wisconsin (Estados Unidos), multiplicándolo por el tiempo, en minutos, que uno tarda en quemarse. Por ejemplo: si la piel se enrojece después de cinco minutos al sol sin ningún tipo de protección, un SPF30 mantendría la dermis a salvo durante 150 minutos (el resultado de multiplicar el SPF por los minutos que tardamos en quemarnos: 30x5=150). En todo caso, los expertos recomiendan reaplicar la crema cada dos horas como máximo, ya que hay otros factores, como el sudor o el roce con la toalla, que pueden disminuir su acción protectora

2. La cantidad: más = mejor 

En opinión de la dermatóloga española Mª Dolores Sánchez-Aguilar, “si la cantidad del producto no es suficiente, su acción fotoprotectora teórica –indicada por el factor de protección SPF– será sensiblemente menor”. La cantidad a aplicar es de dos miligramos por centímetro cuadrado, esto es, una avellana para la cara y el escote (por separado), y una nuez para cada brazo y cada pierna, la espalda y el abdomen. ¿Te quedó claro?

3. El modo de uso influye 

Hay que repartir el producto de forma uniforme sobre la piel limpia y seca y, al menos, media hora antes de exponerte a los rayos del sol, ya sea en la alberca, dando un paseo o sentada en una terraza. Según la Dra. Natalia Ribé, especialista en medicina estética, “además, conviene reaplicarlo cada dos horas y después de cada baño”.

Para elegir la fórmula, tienes numerosas opciones que se multiplican en aceite, crema, leche o espuma; fórmulas untuosas o sprays ligeros; versiones con color o salpicadas con pequeñas partículas doradas.

Un dato más: recuerda siempre que no es lo mismo el sol del Pacífico que el del Caribe. En este caso, el número de fotoprotección puede variar sensiblemente. Es muy importante tener en cuenta en qué lugar se va a producir la exposición: la radiación solar es más intensa cerca del Ecuador puesto que incide verticalmente sobre la Tierra.

¿Qué otros errores crees que has cometido al solearte?

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