Así era Andrew Cunanan, el asesino serial que mató a Gianni Versace

Así era Andrew Cunanan, el asesino serial que mató a Gianni Versace
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Un asesino en serie es aquel que asesina a tres o más personas en un lapso de 30 días o más. Andrew Cunanan cometió cinco asesinatos en solo tres meses.

 

Cunanan nació en California, en 1969, y el crimen quizá lo traía como herencia, pues cuando su padre se jubiló del ejército, comenzó a trabajar como corredor de bolsa, pero malversaba fondos, por lo que terminó huyendo a Filipinas, su país de origen, para que no lo atrapara la policía.

 

 

Su madre, quien le inculcó la lectura de la biblia cuando era pequeño y le decía que él estaba destinado a ser una persona superior a las demás, descubrió su homosexualidad cuando él tenía 19 años, y durante la discusión, Andrew la aventó contra una pared y le dislocó un hombro.

 

De hecho, de acuerdo con un artículo de 1997 de Vanity Fair, incluso los vecinos ubicaban a Andrew como un adolescente violento, y recordaban el incidente con su madre.

 

En ese artículo también señalan que Andrew contaba con un IQ al nivel de un genio y, además, como un gran mentiroso.

 

Estudió en la universidad de California, en San Diego, durante un año, pero pasó la mayor parte del tiempo en la bahía de San Francisco, moviéndose en la comunidad gay. Mentía sobre haber estado en Yale y los reportes dicen que cambiaba sexo por vivienda o por soporte financiero. También traficó drogas.

 

Y así fue como se forjó camino: por medio de su encanto o de engaños. Tenía un gran ingenio y una memoria fotográfica que le permitía apantalla a quien se pusiera en su camino.

 

Su primera víctima fue Jeffrey Trail, un amigo suyo del cual incluso se refería como “su hermano”. Lo asesinó a martillazos, lo envolvió en una alfombra persa y su cuerpo fue encontrado en el departamento de su segunda víctima, David Madson.

 

A Madson, arquitecto que comenzaba su carrera y con quien antes había tenido una relación amorosa, lo asesinó a balazos. Su cuerpo fue encontrado en a la orilla de un lago en Minnesota.

 

Su tercera víctima fue en Chicago; se trató del magnate inmobiliario Lee Miglin. Su cuerpo fue encontrado envuelto en cinta adhesiva, con dos agujeros en las fosas nasales, lo cual sugirió a los investigadores un juego de bondage sexual.

 

Tenía muchas heridas de cuchillo en el pecho y su garganta había sido cortada con una sierra. En la escena del crimen, la policía encontró evidencia de que Cunanan se había bañado en la bañera de Miglin, se había afeitado y comido un sándwich en su cocina.

 

En ese momento se convirtió en uno de los criminales más buscados por el FBI.

 

 

Su cuarta víctima, William Reese, fue un “homicidio funcional”, es decir, a diferencia de las otras víctimas, a Reese probablemente lo asesinó simplemente para robar su camioneta Chevrolet roja.

 

El famoso diseñador Gianni Versace fue su última víctima y en realidad, las investigaciones nunca comprobaron si lo había conocido previamente, ni cuál fue el motivo para asesinarlo.

 

 

Al principio se creyó que había sido un robo, pues el diseñador portaba 12 mil dólares en efectivo cuando fue asesinado.

 

Pero una vez que se dieron cuenta de que se trataba de Andrew Cunanan, se descartó el intento de robo y comenzaron otras hipótesis, como que lo hizo por la mera fama, como una forma de cerrar su lista con un nombre famoso que lo llevara a ser parte de la historia: Versace.

 

También se relacionó a Cunanan con la mafia, pues al lado del cuerpo de Versace se encontró una paloma muerta, que desató conjeturas sobre la posibilidad de que el asesino serial fuera un sicario.

 

El jefe de la policía de Miami, Richard Barreto, explicó la falta de un motivo claro así:

 

No podemos establecer un motivo. Podría ser un robo. Podría ser que Andrew Cunanan buscaba fama tiroteando a una persona de este calibre. Podría ser venganza. A todos nos gustaría saberlo, especialmente en un caso de alto perfil, como este. Desafortunadamente, la verdadera respuesta es que nos hemos hundido con el barco, por decirlo de alguna forma.

 

Andrew Cunanan se suicidó con un disparo en la cabeza, en una casa flotante de Miami y rodeado por el FBI, 8 días después de asesinar a Gianni Versace.

 

 

 

 

*Con información de NewsweekVanity Fair y Smoda

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