Recomendaciones para el buen manejo de una línea de crédito

Recomendaciones para sacar un crédito y no morir en el intento
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El crédito es una herramienta muy útil para lograr tus metas financieras.

Muchas mujeres tememos sacar uno por miedo a contraer deudas y no poder controlarlas; sin emabrgo, es un mito común que sólo sirva para salir de emergencias.

La realidad es que con un buen uso se pueden alcanzar diferentes objetivos que de otra forma serían muy complicados de lograr.

Aprender a usar este instrumento de forma responsable abre la puerta para crecer financieramente y lograr metas cada vez más grandes.

Mujer haciendo cuentas frente a una computadora

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¿Cómo sacar un crédito sin endeudarse?

Gabriela Rolon, directora de Desarrollo de Negocio de Creditas México, menciona que un buen uso del crédito puede ayudar a financiar un negocio o un emprendimiento.

“Existen dos tipos principales de financiamiento: el crédito simple que te depositan una sola vez, como puede ser un crédito automotriz; y la línea de crédito revolvente, que te da un monto para poder ir gastando y refinanciando, como una tarjeta de crédito".

"Cuando utilizas bien una línea de crédito, por ejemplo, puedes financiar un negocio para hacerlo crecer, invirtiendo o utilizando los recursos para capital de trabajo, como la compra de materia prima”, señala.

Para que aprendas a utilizar tu crédito de forma responsable, nos compartieron las siguientes recomendaciones:

No todo son tarjetas

Más allá de las tarjetas del banco o tiendas departamentales, hay otros financiamientos que puedes obtener para tus proyectos.

Por ejemplo, existen los créditos para comprar un coche o una vivienda, los créditos con garantía, los préstamos de nómina que se descuentan directamente de tu salario, entre otros.

Investiga cuál es el crédito que mejor se adapta a tu perfil y necesidades.

No es dinero gratis

No debes considerar el crédito como si fuese dinero gratis para tus compras.

Recuerda que todo lo que compres con crédito deberá estar sustentado con tu capacidad de pago futura, y que deberás cubrir el capital e interés a tiempo para mantener un buen historial crediticio y buena salud financiera.

Revisa las mensualidades

En relación con el punto anterior, lee bien tu contrato para conocer cuáles serán tus pagos mensuales. Asegúrate de poder cubrir el monto cada mes, sin que esto afecte tus gastos usuales.

Mujer revisando tarjeta de crédito y teléfono

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Controla tu impulso de compra

Al tener aprobado un crédito, puedes caer en la tentación de irte de shopping y sobreendeudarte. ¡Detente!

No sucumbas ante la voz en tu cabeza que te dice “te lo mereces”; piensa a largo plazo y, en su lugar, ahorra para cubrir tus gastos ordinarios, incluidos los pagos de crédito, sin problema. 

Paga a tiempo

Debes aprender a ser puntual. Los intereses se acumulan y fácilmente se convierten en una bola de nieve que puede aplastar tus finanzas.

Coloca recordatorios en tu celular para no olvidar ninguna mensualidad y que sea una de tus primeras acciones al recibir tu sueldo, o si es posible, aprovecha las facilidades de domiciliación. 

Construye y aprovecha tu historial

Si solicitas un préstamo por primera vez, es posible que te aprueben un monto pequeño, ¡pero no te desanimes!

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Crédito fotos: iStock, Freepik

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