Cómo usar tacones en una boda y aguantarlos más tiempo sin lastimar tus pies
Ya se acerca esa boda a la que te invitaron y mueres por estrenar esos tacones de infarto que te compraste.
Están divinos, sí, y matadores. Si no estás acostumbrada a usar tacones o si son demasiado altos o el modelo es incómodo, hay trucos para no destrozar los pies.
Evita que se lastimen y que a la tercera canción ya no puedas dar ni un paso más con estas recomendaciones.
Haz que los tacones se conviertan en tus mejores amigos con estos tips para hormar tus zapatos.
Trucos para que tus tacones no te lastimen
Elige los zapatos adecuados
Si no usas tacones seguido, no te vayas por ese modelo con tacón de aguja de 10 cm. Mejor utiliza unos de 5 o 6 cm de alto con tacón ancho. Verás cómo los aguantas toda la noche.
También puedes llevar zapatos de tacón corrido, sobre todo si es jardín o una boda de día informal. Los zapatos con plataforma también te ayudarán a crecer unos centímetros sin morir en el intento.
Aplica aire caliente
Antes de llevar tus zapatos a la boda, haz esto en casa: ponte calcetines gruesos y cálzate, después, con la secadora de cabello, pasa el aire caliente encima para que se moldeen.
Utiliza sprays antifricción o desodorantes
Existen productos que te ayudarán a prevenir rozaduras o ampollas por fricción. Estas cremas o sprays crean una especie de película que protege la piel para que el zapato no la lastime. Revisa éste que te presento aquí.
También sirve aplicar desodorante tipo roll on en los dedos, talones y partes laterales, que es donde existe más fricción y contacto con los zapatos.
No estrenes los zapatos el mismo día
Se necesitan varios días para amoldar la horma de un zapato a tu tipo de pie, sobre todo si los tacones que te gustaron tienen más de 10 cm.
Camina por tu casa, sal a la calle, ve si se resbalan, si tiende a doblarse el tobillo, etc. Bajo advertencia no hay engaño.
Bolsas de agua congelada
Si los zapatos te quedan apretados, llena dos bolsas herméticas con agua y mételas bien acomodadas dentro de los zapatos. A su vez, coloca los zapatos dentro de otra bolsa y mételos al congelador. El agua congelada se expande y esto ayudará a ensanchar los zapatos.
Coloca almohadillas o plantillas
Además de las clásicas almohadillas o plantillas de toda la vida, ahora existen unas de silicón o gel que aportan más confort.
Se pueden adherir a cualquier parte del calzado para evitar dolorosos roces o en la plantilla para contrarrestar el peso del cuerpo.
Usa tus tacones días antes y revisa dónde te molestan para colocar las almohadillas.
Usa protectores de tacón
Si adoras tus zapatos de aguja pero la boda será en jardín y temes quedarte enterrada a cada paso, existe una solución.
Estos protectores de tacón evitarán que te entierres y batalles o hasta te lastimes intentando desenterrarte.
Puedes encontrarlos aquí.
Raspa las suelas
Si las suelas son duras y notas que te resbalas, podría ser peligroso. Sal a la calle y talla las suelas de los zapatos para que tengan mayor agarre.
También venden pegotes antideslizantes especiales para suelas. Más vale ir segura.
Inyecta ácido hialurónico
Así como lo oyes. Esta solución es más extrema y consiste en inyectar ácido hialurónico en la planta del pie para resistir el dolor de tacones incómodos.
Crédito fotos: iStock